Exámenes físicos, pruebas y otros procedimientos

Es mejor obtener información individualizada sobre lo que ayudará a un paciente a tolerar mejor las pruebas y demás procedimientos.
Los siguientes son ejemplos de adaptaciones o estrategias que pueden ayudar a los pacientes autistas.

La anticipación es clave

  • Explicar siempre qué se va a hacer antes de hacerlo.

  • Mostrar el instrumental al paciente, o al menos imágenes del equipo, antes de usarlo.

  • Si es posible, hacer una “simulación” de las pruebas o procedimientos difíciles.

  • Decir al paciente cuánto tiempo es probable que lleve hacer un examen o procedimiento.

  • Avisar al paciente antes de tocarle o hacerle algo.

  • Limitar la cantidad de tiempo que un paciente debe estar desnudo o en bata.

  • Dar tiempo extra para procesar las cosas que necesitan ver, oír o sentir antes de responder.

  • Permitir que se siente, se acueste o se apoye en algo durante los procedimientos, cuando sea posible.

  • Ofrecer descansos o permitir que la persona use una señal para solicitar una pausa.

  • Preguntar al paciente de vez en cuando si es capaz de manejar el dolor o la incomodidad.
En muchos casos, tener una planificación cuidadosa y las adaptaciones apropiadas puede permitir a los pacientes tolerar exámenes y procedimientos que anteriormente han sido intolerables.
Sin embargo, puede haber ocasiones en que los pacientes necesiten anestesia para tolerar algunas pruebas o procedimientos.